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lunes, 30 de junio de 2014

Salwa Bughaigis defensora de los derechos humanos


Salwa Bugaighis (Bengasi, 24 de abril de 1963 − Ibídem, 25 de junio de 2014) fue una  política y  activista libia de derechos humanos asesinada en Bengasi el 25 de junio de 2014.


Nos unimos a ONU Mujeres  en su condena enérgica al asesinato de la líder libia y  abogada por los derechos de las mujeres  Salwa Bugaighis.  Con ellas nos unimos a millones en el duelo por la pérdida de una hermana y valiente defensora de los derechos humanos.  Estamos  indignadas y profundamente triste por este brutal asesinato.

Salwa fue asesinada poco después de emitir su voto en la elección de Libia, un derecho  por el que ella luchó como miembro del Consejo Nacional de Transición durante la revolución de 2011. Salwa trabajó con Karama, una organización colaboradora del Fondo de ONU Mujeres para la Igualdad de Género,  capacitando   activistas y líderes y promoviendo   la participación política de las mujeres en Libia. Ella jugó un papel clave en el desarrollo de la nueva Constitución de Libia. Muchos colegas de ONU Mujeres la conocíeron en estas actividades, y como participante activo en la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer. 


Expresamos nuestras profundas condolencias a su familia y amigos. Salwa Bugaighis era una líder valiente que abogó por los derechos humanos de su pueblo. Con su muerte, se nos recuerda una vez más de las amenazas a los logros duramente ganados para las mujeres y niñas en todo el mundo. En muchos países, las mujeres que participan en la política o en la cara del activismo sufren  intimidación y  violencia. ONU Mujeres pide medidas urgentes para llevar a los criminales que perpetraron este acto cobarde ante la justicia.

 El asesinato de Salwa Bugaighis rompe nuestros corazones, pero no va a romper nuestra determinación  para promover la paz y la participación plena e igualitaria de la mujer en todas las esferas de la vida, en todos los países del mundo.

 Texto  de la Directora Ejecutiva de ONU Mujeres condenando el asesinato de la activista de los derechos de la mujer en Libia y nos sumamos a todo su contenido . 



http://www.elmundo.es/internacional/2014/06/26/53abf1c0268e3e46698b4576.html
http://www.ansa.it/sito/notizie/mondo/2014/06/26/uccisa-a-bengasi-avvocato-diritti-umani_fb926711-3d2c-486c-b9e5-75a02d39afaa.html
http://www.abc.es/internacional/20140626/abci-activista-asesinada-bengasi-201406261451.html

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domingo, 29 de junio de 2014

Rita Laura Segato antropóloga feminista



Rita Laura Segato es profesora de Antropología y Bioética en la Cátedra UNESCO de la Universidad de Brasilia y dirige el grupo de investigación Antropología y Derechos Humanos del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Brasil. Obtuvo su doctorado en Antropología de Queen´s University of Belfast, Irlanda del Norte. Argentina afincada en Brasil desde hace cuatro décadas, ha trabajado también en universidades de Estados Unidos, Canadá, Francia y Argentina, entre otros países.

Ha publicado extensamente artículos y libros, entre éstos La escritura en el cuerpo de las mujeres asesinadas en Ciudad Juárez (2014) La nacion y sus otros: raza, etnicidad y diversidad religiosa en tiempos de politicas de la identidad (2007) y Las estructuras elementales de la violencia (2003). Su labor académica se conjuga con el activismo y la colaboración en organizaciones que trabajan los temas de género y raza. Una parte muy importante de su trabajo se ocupa de los asesinatos de mujeres en lugares como Ciudad Juárez, México, El Salvador o Guatemala, entre otros. Estos crímenes suelen considerarse bajo la categoría de feminicidio. 
El trabajo de la Dra. Segato va dirigido a establecer una nueva tipificación para este tipo de delitos –feminicidio– de modo que puedan ser vistos en los tribunales internacionales de derechos humanos. -





Mujer y cuerpo bajo control 
 KARINA BIDASECA
Feminismo. En esta entrevista, la especialista argentina Rita Segato  (Buenos Aires, 14 de agosto de 1951) traza un mapa preocupante de la violencia de género en todo el suelo latinoamericano.

Rita Segato es una intelectual feminista lúcida. Vive en Brasil, nació en el barrio porteño de Constitución y se define como una mujer del Sur. Comprometida con el feminismo latinoamericano, los movimientos indígenas y el movimiento negro en Brasil, sus libros son un bálsamo al cual recurrir para poder penetrar los grandes dilemas de nuestro tiempo. Acaba de publicar La escritura en el cuerpo de las mujeres asesinadas en Ciudad Juárez (Tinta limón). Esta entrevista realizada en Buenos Aires es un fragmento de una charla sobre renovados proyectos emancipadores.

–¿Qué cambios ha observado en Ciudad Juárez, y en su propia reflexión, en la década que va de 2003 a 2013?
–En Ciudad Juárez descubro el territorio, la territorialidad. Lo que antes se decía “estar en la base” hoy se dice “estar en el territorio”. Ha pasado a formar parte del vocabulario de las personas y del vocabulario político. En 2003 yo empiezo a ver al cuerpo de las mujeres como una función territorial, como territorio mismo y lo relaciono con la idea de soberanía. Desde los 70 se venía hablando de la posición de la mujer como “naturaleza”, lo que después pasó a ser criticado dentro del feminismo. Eso pasó a ser muy fértil de varias formas: comencé a decir que el cuerpo de las mujeres era el propio campo de batalla donde se plantaban las banderas del control territorial, jurisdiccional, donde las nuevas corporaciones armadas en las modalidades mafiosas de la guerra no convencional, emitían los signos de sus siempre fugaces victorias, de su capacidad de soberanía jurisdiccional e impunidad, y también comencé a pensar en los porqués del cuerpo como ese bastidor en que se cuelgan insignias. También vi, que el cuerpo es nuestro último espacio de soberanía, lo último que controlamos cuando todas nuestras posesiones están perdidas. Las afinidades semánticas entre cuerpo y territorio, dentro del paradigma colonial, son infinitas… Posiblemente el cuerpo indio no tenga, desde una perspectiva pre–colonial o no–colonial, esos mismos significados. Pero la colonialidad se los asigna. Esto, cruzado con las políticas de las identidades, cuya crítica es el tema central de mi libro La nación y sus otros es también, y de otra forma, fértil. El formateo de las identidades, como soporte de la política, tiene que ver también con lo territorial, lo que voy a llamar en dos ensayos de ese libro y en otro texto posterior el carácter territorial de la política hoy. La cultura política de las identidades es también territorial y, si prestamos atención, constataremos que hasta la política partidaria es hoy una cuestión de identidad y, por lo tanto, de territorio. La expansión de las identidades en red, las formas de anexión de miembros a redes identitarias o, en otras palabras, en redes como territorios, es hoy el tema y el proyecto de la política. Así como la religión hoy se prende al control fundamentalista de los cuerpos (y aquí coloco en el mismo plano el velo obligatorio en el islam y la obsesión anti–abortista entre los cristianos) por razones que son de soberanía jurisdiccional y no de orden teológico, moral o doctrinal, de la misma forma, las razones de la política son hoy del orden de la cohesión y de las alianzas y, en ese sentido hasta la política partidaria es hoy “política de identidad” y su proyecto puede ser también comprendido como territorial, entendiendo la red de sus miembros como su territorio. Entonces, el tema de los cuerpos, de su control y de la espectacularización de ese control sobre los cuerpos se ha vuelto central en la política.

–¿Cómo define la política de la identidad?
–Cuando cae el Muro de Berlín y finaliza la Guerra Fría, el paradigma dominante de la crítica política pasa a ser el de la política de las identidades. Identidades que, para ese fin, pasan a ser formateadas y globales. La crítica antisistémica, al sistema capitalista y sus metas de acumulación y concentración pasa a ser sustituida por una política de identidades y se enfoca en lo distributivo. En ese sentido el discurso de los DDHH pasa a tener un papel que poco se ha examinado y cuya meta “inclusiva” no es otra que la de poner límites al pacto estado–capital. En lugar de la crítica anti–sistémica, pasa a considerarse que deben haber algunas garantías de protección para aquellos que no son igualmente “productivos”, “desarrollados”, “modernos” o, mejor, “modernizados”, para que puedan incluirse, no sólo a los derechos sino también en el mercado. Las políticas de inclusión siempre hay que mirarlas bajo un signo de interrogación. Son interesantes como agitación porque cuando uno dice “hay que incluir” está también apuntando a fallas severas del orden social, de la justicia, del bienestar colectivo. Entonces los DDHH entran ahí, cuando hay que poner límite a la intervención del capital en las instituciones, al poder del capital en el orden estatal. El capital nunca se satisface y los DDHH son la normativa que intenta ponerle coto a su injerencia. Las políticas de las identidades no son más anti sistémicas como fue la política del activismo de los 70. Cuando pasa ese período histórico, queda una especie de silencio, un interregno, durante el cual los de nuestra generación quedamos perplejos ante la caída del Muro. Aunque no fuésemos pro rusos, aquello era un mundo alternativo con un proyecto alternativo al capital. Cuando esa ilusión acaba, sobreviene un gran silencio. No tenemos una historia de la mentalidad, no he visto investigaciones de cómo se transforma la conciencia de las personas en el período que va desde los 60 hasta la transformación de los paradigmas de la política, de cómo se transformó el paisaje de nuestra conciencia a través de un cisma ideológico muy profundo.


–¿Ha podido el discurso de los DDHH proteger a las personas de la violencia del proyecto capitalista? Y trasladado esto a las mujeres, ¿ha podido protegerlas de la masacre misógina?
–Creo que no, lo que estamos viendo es que ese techo de contención de los males a que pueden ser expuestas las personas muestra su incapacidad de protegerlas, y es indispensable liberarnos de nuestra fe cívica y comenzar a sospechar de la capacidad del Estado y de las organizaciones supraestatales para proteger a las personas. Más que de una fe cívica, estamos sufriendo hoy de una ceguera cívica. Hemos utilizado demasiado tiempo y puesto demasiadas fichas a la expansión de esos derechos y lo que vemos es un mundo en que nunca hubo mayor concentración de riquezas y las personas están cada vez más vulnerables. Tenemos que preguntarnos qué ha pasado y qué está pasando, cómo hemos perdido derechos básicos en la Argentina frente al camino del capital, es decir, a los valores de la competitividad, la productividad, la acumulación, la concentración cada vez mayor y la exclusión. Entonces el discurso de los DDHH, como promesa efectiva de protección por parte de cortes estatales supraestatales, es, hasta el momento, francamente ficcional, es una falsa conciencia. La justicia moderna es punitiva por naturaleza, no constructiva. Todo el peso es colocado en la negatividad, y prácticamente no hay resultados en los aspectos positivos de la justicia. Lo que es incontestable es el valor de agitación y pedagógico del discurso de los Derechos Humanos, en su capacidad de persuadirnos de que debemos transformar valores, costumbres, y por lo tanto, humanizarnos, azuzando nuestra insatisfacción ética por una mayor felicidad colectiva.
–¿En qué momento de su trayectoria se cruza con el pensamiento de Aníbal Quijano?
–Cuando escucho en él la manera más lúcida y más conmovedora de hablar de la raza y el racismo sin entrar en la trampa de las políticas de las identidades de matriz multicultural burguesa, que es ornamental: las figuritas del indio, del negro, cada uno haciendo su papel, Quijano propone cómo pensar la raza históricamente y no a partir de íconos de diversidad que son superficiales, cosméticos, enlatados, falsamente naturalizados, como en el multiculturalismo. Cuando cae el Muro se abren dos caminos nuevos de la política: uno es del multiculturalismo anodino, como le ha llamado Homi Bhabha, donde la estructura, o sea, el sistema, no está en juego y no cambia, y el otro camino es el de la crítica de la colonialidad como la estructura profunda que guía la reproducción de las desigualdades. La crítica de la colonialidad busca en las lógicas indígenas y en las lógicas comunitarias caminos alternativos al del capital. Quijano nos ofrece un análisis sociológico, filosófico e histórico que permite entender la raza como una invención histórica y por fuera completamente del multiculturalismo. La raza es producto de la racialización de origen colonial. Leí recientemente una propuesta de descolonización maravillosa en un libro publicado por el gobierno de Evo Morales, pero que no cita al autor que es el que genera esta idea de una colonialidad diferente del colonialismo y de un pensamiento descolonial. Y me pareció equivocada la utilización de formulaciones que son claramente de Quijano sin el debido reconocimiento de autoría. El reconocimiento de la gestación de las ideas es sagrado para mí, y no se trata de propiedad y sí de parentalidad. Reconocer autoría es muy importante sobre todo en nuestro mundo latinoamericano, en primer lugar porque un autor es una posición en la escena histórica y tenés que comprender la escena y la historia; si vos lo censurás, le negás este conocimiento a la gente, le negás acceso a la genealogía de ese pensamiento, el quién y el dónde. La genealogía permite situarse en una historia. Me doy cuenta de eso a partir de una lucha en la que participé activamente, como fue la lucha por las cuotas raciales de estudiantes negros en Brasil, cuyo proceso de gestación se ha censurado. Esa lucha –que protagonicé en 1998– contra la discriminación de un estudiante negro en el Doctorado de Antropología en la Universidad de Brasilia originó la primera propuesta de reserva de cupos para estudiantes negros y algunas medidas inclusivas para estudiantes indígenas. Hoy es una realidad consagrada pero condicionada a una censura de la historia que originó ese proceso debido a la cual muchos estudiantes negros piensan que un rector, un ministro o el mismo Lula tuvo un día una idea beneficiosa y, con un golpe de pluma, tuvieron la gentileza de firmar un decreto que les dio acceso a la universidad. Decirles que sujetos concretos, situados en las escenas históricas de nuestro continente pensaron propuestas que tomaron forma es hablarles de su propia potencia transformadora y constituye una verdadera pedagogía política. El reconocimiento de la autoría y del protagonismo son esenciales por esa razón autorizadora, especialmente en un continente en el que las universidades, por su eurocentrismo endémico, enseñan que las ideas y los grandes cambios históricos siempre se originan en otro lugar.

¿Cómo pensar entonces la relación de afectación sumamente cruel y violenta del cuerpo de las mujeres por el paradigma territorial de la política?
–El cuerpo de las mujeres es particularmente afectado por este paradigma territorial que domina hoy el pensamiento contemporáneo. Como sostuve en mi libro Las estructuras elementales de la violencia , la violencia sexual tiene componentes mucho más expresivos que instrumentales, no persigue un fin, no es para obtener un servicio. La violencia sexual es expresiva. La agresión al cuerpo de una mujer , sexual, física, expresa una dominación, una soberanía territorial, sobre un territorio–cuerpo emblemático.
Entrevista con Rita Laura Segato: “violencia de género”

–¿Cómo mueren las mujeres en ese espacio de la guerra que has llamado “segunda realidad”?
–La mujer muere en el espacio doméstico por la gran lucha, la gran tensión entre los géneros, porque el hombre está masacrado, emasculado por el capitalismo contemporáneo. La presión sobre el sujeto masculino es enorme, y éste se restaura como masculino también mediante la violencia. Restaura dentro de casa la masculinidad que pierde fuera de casa. Pero también la mujer muere en otras esferas. Por ejemplo, en las estadísticas de Bolivia entre 1 de enero y el 31 de agosto de 2011, de todos los asesinatos cometidos, 62,5% son de mujeres, y menos del 51% ocurren en el espacio doméstico; el otro 49% ocurren en otro lugar y eso nuestras categorías no lo alcanzan a ver. Muchos de esos óbitos, que, cada vez más ocurren fuera del ambiente doméstico, son de mujeres que mueren en las guerras informales de la segunda realidad, esfera en que las mujeres y, en algunos casos, niñas, como lo fue Candela, son torturadas, violentadas sexualmente, asesinadas como espectáculo de la soberanía de quien tiene el control territorial en esas guerras que nunca empiezan y nunca terminan, que son guerras continuas, sin declaración y sin armisticio, sin victorias ni derrotas más que transitorias. La impunidad y discrecionalidad de lo que se puede hacer con el cuerpo de las mujeres como el lugar donde se implanta la insignia de la soberanía expresa el control territorial en la modalidad mafiosa de las nuevas guerras informales.


POR MAITÉ HERNÁNDEZ LORENZ
Has trabajado el tema de la violencia de género, en específico, los asesinatos de las mujeres en Ciudad Juárez. Después de un fuerte posicionamiento en los titulares de algunos rotativos del mundo, la noticia ha dejado de serlo, o al menos, se ha agazapado entre tanta violencia de todo tipo. ¿Qué ha ocurrido? ¿En qué medida crees que estudios similares han posibilitado otro tipo de análisis sobre el particular? ¿Ha sido eficaz? ¿Qué cambios ha promovido entre la ciudadanía? ¿Cómo se ha establecido la relación con la política y sus gestores?
Ciudad Juárez constituye un paradigma, la primera señal de que un nuevo tipo de violencia letal contra las mujeres se estaba instalando. En 1993, cuando los primeros cuerpos empiezan a aparecer como resultado de las búsquedas de madres y vecinos en los campos baldíos de esa frontera con el país del Norte, comienza también un muy eficaz movimiento por parte de las mujeres de esa localidad que consigue visibilizar lo que allí estaba ocurriendo. Esa noticia, como no podría ser de otra forma, fue acompañada por una gran extrañeza y, naturalmente, la extrañeza fue seguida de incredulidad: ¿qué significaban esos crímenes?, ¿qué llevaría a perpetrarlos?, ¿quién y para qué sería capaz de tamaña crueldad contra jóvenes mujeres indefensas?
A partir de ese momento, diversos investigadores se lanzaron a hacer apuestas sobre el propósito y los operativos de los cuales los cadáveres encontrados serían el resultado. De este esfuerzo surge una variedad de hipótesis que, según algunos, llega a más de cuarenta. Entre ellas: el robo de órganos, la producción de películas pornográficas y el tráfico de ciber-pornografía, así como también la reacción de los hombres locales al hecho de que hay mucho empleo para las mujeres en las maquiladoras de Ciudad Juárez ―una especie de “venganza” de género por su ascensión en el campo laboral.
Dos periodistas de gran coraje, la chicana Diana Washington y el mexicano Sergio González, se lanzaron a la recolección minuciosa de datos y evidencias y publicaron dos importantes libros sobre los casos; el gran escritor chileno Roberto Bolaño les dedicó un capítulo en su importante libro póstumo 2.666; y una documentalista de sensibilidad finísima, Lourdes Portillo, rodó la impresionante película-documento Señorita Extraviada.
Entre las interpretaciones, considero que una contribución importante fue ofrecida por Julia Monárrez, que apunta al carácter sistémico de estos crímenes. Mientras tanto, las fuerzas estatales y los poderes locales ―me refiero a la policía, fiscales y medios de comunicación― inician su campaña por privatizar estos crímenes, es decir: para fundirlos en el gran bulto de los crímenes contra las mujeres perpetrados en todo lugar por maridos o novios celosos y asesinos violadores seriales.
Cuando entro en contacto con la realidad de Ciudad Juárez, me doy cuenta en primer lugar de la ininteligibilidad de los crímenes y de cómo esa imposibilidad de entenderlos causa incredulidad: “¿y por qué lo harían?”, responde la gente a las campañas. También percibo la presión de todos los poderes locales y nacionales en México para reducirlos a crímenes corrientes, comunes, habituales de género. Pasé entonces a pensarlos a partir de lo que tenían en común con los crímenes de violación que había estudiado en mi libro Las Estructuras Elementales de la Violencia, y también a partir de lo que tenían de diferente.
De eso resultó un primer ensayo, “La Escritura en el Cuerpo de las Mujeres en Ciudad Juárez”, que fue traducido después al portugués, al alemán, al italiano y al inglés, con un modelo y un vocabulario interpretativo que obtuvo una repercusión muy considerable, sobre todo porque también fue seguido de algunas entrevistas que se difundieron mucho en internet.
«Una de las expresiones que resulta de mi análisis y que veo en la actualidad frecuentemente revisitadas en los medios es la idea del “cuerpo de mujer como campo de batalla”.
Entre los temas de mis análisis se encuentran el largo período de impunidad de los perpetradores, que se extiende a más de una década. Ello demuestra, más allá de cualquier duda, que se trata de crímenes del poder, no de crímenes de propósito instrumental y sí de crímenes expresivos. Ahora bien, para descifrarlos tenemos que entender qué plantean, cuál es su mensaje y lo que expresan es la capacidad de dominio, de soberanía jurisdiccional de sus perpetradores y la cerrada alianza de lealtad entre los mismos. Esta expresividad se instaló como un lenguaje, y se automatizó como tal: es en el cuerpo de las mujeres que se envía este mensaje de dominio a la comunidad y a la nación.
Estos asesinatos constituyen un nuevo tipo de crimen contra las mujeres, que no pueden ser referidos a motivaciones de tipo personal o personalizable; es decir, no son crímenes de naturaleza privada ni asociables a relaciones interpersonales entre víctimas y victimarios ni a trazos de personalidad de los perpetradores. Se encuentran asociados a las nuevas formas de la guerra y, por lo tanto, para entenderlos, es necesario analizar el fenómeno de las guerras difusas, no formalizadas, de varios tipos: entre mafias, gangs y maras, así como de fuerzas para-estatales contra la población y entre sí.
Su novedad con relación a los formatos de la guerra consiste en que las mujeres no son meramente violadas por la tropa sino que son torturadas hasta la muerte, es la destrucción de su cuerpo lo que se pretende, y con ella la destrucción completa de la moral de la facción enemiga y de su capacidad de tutela y protección con relación a los cuerpos y al bienestar de sus mujeres.
El clima de impunidad resulta de la gran desigualdad y no es solamente el factor causal de los crímenes de Ciudad Juárez sino, sobre todo, su efecto, pues estos crímenes sellan un pacto de lealtad entre los hombres que conjuntamente los perpetran ―así como también de las mujeres que, por ser familiares de estos hombres, tienen información privilegiada sobre los mismos―. Esta es la enumeración muy compactada de los puntos por los que pasa mi análisis de este fenómeno.
Por estas mismas características, que son hoy, creo yo, bastante más visibles que al comienzo, este tipo de crímenes no ha decrecido sino aumentado en número, se ha extendido a todo México que, según la opinión pública, se ha “juarizado”, y a toda América Central, donde los números de victimización de las mujeres en países como El Salvador, Guatemala y Honduras son espantosos. También han sido reportados en el Congo, donde las grandes corporaciones interesadas en el mineral utilizado en celulares se encuentran por detrás de guerras dichas tribales, que operan sobre el cuerpo de las mujeres del grupo armado enemigo dañándolas de una forma que relatores internacionales han descrito como “vaginal destruction“.
«En Ciudad Juárez, las propias activistas y sus parientes han pasado a ser las víctimas, y la mayoría ha dejado ya la ciudad. Un crimen reciente perpetrado contra dos periodistas de un medio de la Baja California ilustra amargamente lo que estoy queriendo decir. Transcribo del texto “¿Para qué las torturaron?”, publicado en la página virtual http://apiavirtual.net/2011/09/19/%C2%BFpara-que-las-torturaron/ , y los detalles de la conflictividad que llevó al crimen pueden ser seguidos a partir de esa página:
La editora de la revista Contralínea en Baja California, Lorena Rojas, describe la tortura de Marcela Yarce y Rocío González, asesinadas el primero de septiembre (de 2011), en un correo entre colegas. Reproduzco su texto literalmente: “Lo más triste es la indolencia y complicidad de las autoridades del DF [...] Descartan la tortura y a mi compañera Marcela, la mantuvieron colgada como si la fueran a ahorcar y le dieron un balazo en el clítoris, como parte de la tortura, a Rocío le arrancaron los pezones a balazos y luego le dieron un balazo en el tórax. Marcela se desangró por la vagina, finalmente murieron asfixiadas por la soga”.
«Esto sucedió este año, en 2011, y es un crimen más entre muchos de este tipo cometidos contra la corporación enemiga, en este caso un diario y sus denuncias, en el cuerpo de sus mujeres.
«Hago notar que, aunque los hombres mueren mucho más en conflictos armados formales e informales, así como son muchos más numerosos los homicidios y la tortura de hombres, sin embargo la proporción de las mujeres que mueren de esta forma y sufren este tipo de violencia está aumentando velozmente; pero lo fundamental aquí es entender que los hombres son victimizados en la misma medida en que victimizan, siendo ellos los propios victimarios, mientras las mujeres son victimizadas por hombres y su posición es la de víctimas, excepto en rarísimos casos, es decir, ellas mueren asesinadas y torturadas en número muchísimo mayor de lo que matan torturando.
Mi análisis ha contribuido para la percepción de este factor bélico, que en mucho trasciende la relación anteriormente resaltada por los analistas entre el victimario y su víctima. También promueve la comprensión del género como célula elemental de toda relación de poder, y retira del mismo su carácter de tema de interés parcial, particular, de interés restringido a las mujeres y a la esfera privatizada de lo doméstico. En las nuevas formas de la crueldad de género se manifiestan hoy las relaciones de poder y su forma de operar en escenarios de conflicto localizados y, en especial, del accionar de las corporaciones en las guerras informales características de esta etapa avanzada y ya en fase de descomposición del capitalismo.
Creo que he contribuido a complejizar la comprensión del fenómeno del feminicidio y a retirarla de la privatización a que la empujan el discurso del poder y también algunas líneas dentro del feminismo».
* Tomada de la Revista de Casa Las Américas, Ventana .

http://www.pagina12.com.ar/diario/sociedad/3-175139-2011-08-23.html
http://www.80grados.net/entrevista-con-rita-laura-segato-violencia-de-genero/
http://www.americalatinagenera.org/es/index.php?option=com_content&task=view&id=905&pub_id=1785&ml=1&mlt=s&tmpl=component
http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/Rita-Segato-Mujer-cuerpo-control_0_1081091894.html
http://www.libreriapaidos.com/9789875580183/ESTRUCTURAS+ELEMENTALES+DE+LA+VIOLENCIA%2c+LAS/
http://tintalimon.com.ar/libro/LA-ESCRITURA-EN-EL-CUERPO-DE-LAS-MUJERES-ASESINADAS-EN-CIUDAD-JUREZ
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sábado, 28 de junio de 2014

Pearl Sydenstricker Buck




Pearl Sydenstricker Buck (n. Hillsboro, West Virginia, 26 de junio de 1892 - m. Danby, Vermont, 6 de marzo de 1973) fue una escritora estadounidense y Premio Nobel de Literatura en 1938. Pasó la mitad de su vida en China, adonde la llevaron sus padres misioneros con tres meses de edad y donde vivió unos cuarenta años. Es conocida por el apellido de uno de sus maridos ya que su apellido de soltera era Sydenstricker.

Pearl Comfort Sydenstricker nació el 26 de junio de 1892 en Hillsboro (Virginia Occidental), EE.UU. Sus padres Absalom y Caroline Sydenstricker era misioneros presbiterianos establecidos en China. Pearl fue la cuarta de siete hijos y una de sólo tres que llegaron a la adultez vivos. Nació mientras sus padres estaban en EE.UU. y cuando tenía tres meses de edad volvió a China en la que pasó casi 4 años. La familia vivía en Chinkiang, en la provincia de Kiangsu. El padre pasaba largos meses fuera de casa en misión, la madre predicaba a las mujeres del pueblo en un pequeño dispensario que ella misma estableció. Desde la niñez Pearl hablaba inglés y mandarin, fue educada principalmente por su madre y un tutor chino, el señor Kung. Durante 1900 la familia tuvo que mudarse a Shanghai, poco tiempo después marcharon a EE.UU. a establecer un nuevo hogar. En 1919 conoció al economista en agricultura John Lossing Buck, se casaron y se establecieron en Nanhsuchou. Su primera hija, Carol, nació en 1921, víctima de una enfermedad sufrió retraso mental severo, durante el parto se le detectó un tumor de utero por lo que tuvo que someterse a una histerectomía. En 1925 adoptaron a una bebé, Janice. El matrimonio fue infeliz desde el comienzo, sin embargo duró casi 18 años. Desde 1920 a 1933 el clan vivió en Nanking en el campus de la universidad de la ciudad en la que ambos enseñaban. En 1921 la madre de Pearl murió y pronto su padre se mudó con Pearl y su marido. Las tragedias consecuentes desde 1920 que afectaron a Pearl tuvieron su epítome en 1927 en el Incidente Nanking. En una batalla en que participaron tropas nacionalistas, elementos de Chiang kai-shek, fuerzas comunistas y varios occidentales, resultaron asesinadas muchas personas. Los Bucks pasaron el día escondiéndose hasta que los rescataron hombres norteamericanos. Se mudaron por un año a Japón y luego volvieron a Nanking donde las condiciones aún eran peligrosas.

En 1938 obtuvo el Premio Nobel de Literatura. Pearl murió en marzo de 1973, dos meses después de cumplir los 81 años. Su tumba está ubicada en Green Hills Farm.


Escribió más de 85 libros, muchos de los cuales son novelas que ofrecen un amable retrato de China y su gente. De su estancia en el empobrecido pueblo de Nanhsuchou, Pearl sacó la semilla que la llevaría a escribir The Good Earth y otras historias de China. Su producción literaria abarca géneros tan dispares como el relato, el teatro, el guion cinematográfico, la poesía, la literatura infantil, la biografía y hasta un libro de cocina. Su estilo sencillo y directo, y su preocupación por los valores fundamentales de la vida humana, tienen su origen en el estudio de la novela china.

En 1920 comenzó a publicar sus historias y ensayos en revistas como Nation, The Chinese Recorder, Asia y Atlantic Monthly. Su primera novela, Viento del este, viento del oeste fue publicada por la compañia John Day en 1930. El ejecutivo de esta compañía, Richard Walsh se convertiría en el segundo esposo de Pearl en 1935, después de que ambos se divorciaran. En 1931 la misma compañía publicó La Buena Tierra, que se convirtió en el libro más vendido en 1931 y 1932, ganó el premio Pulitzer y la Medalla Howells en 1935, además fue adaptado para película por la MGM en 1937. En 1938, a menos de 10 años de publicar su primer libro, Pearl ganó el Premio Nobel de Literatura siendo la primera mujer norteamericana en lograr tal reconocimiento. Entre sus obras posteriores cabe mencionar La estirpe del dragón (1942), Los Kennedy (1970) y China tal y como yo la veo (1970). Para el momento de su muerte en 1973, llevaba publicados más de 70 libros entre novelas, colecciones de historias, biografías, autobiografías, poesía, drama, literatura infantil y traducciones desde el chino.

En 1934 se mudó de forma permanente a EE.UU. Junto a Richard compraron una granja, Green Hills Farm en el Condado de Bucks, PA. Adoptaron seis niños más. Su granja es ahora parte del registro de Edificios Históricos, más de 15.000 personas la visitan cada año. Desde el día en que pisó tierra estadounidense, Pearl fue activista por los derechos civiles y de la mujer. Siguió publicando ensayos, en Crisis, el diario de NAACP, y Oportunity, la revista de la Liga Urbana y, durante 20 años, trabajó en la Universidad Howard. En 1942 ella y su marido fundaron la Asociación East and West, dedicada al intercambio cultural y el entendimiento entre Asia y occidente. En 1949 fundó Welcome House, la primera agencia de adopción en que aceptaban niños asiáticos y mestizos. Además en 1964 estableció la fundación Pearl S. Buck que proveía de atención para niños asiático-americanos que no eran elegibles para adopción, lo que también benefició a cientos de niños en varios países de Asia.

Obra

East Wind, West Wind (Viento de Este, viento de Oeste, 1930).
The Good Earth (La Buena Tierra, 1931), con la que obtendría el premio Pulitzer.
The Young Revolutionist (La joven revolucionaria, 1931).
Sons (Hijos, 1932).
The First Wife (La primera esposa, 1933).
The Mother (La madre, 1934).
A House Divided (Un hogar dividido, 1935).
Fighting Angel (El ángel combatiente, 1936).
This Proud Heart (Este orgulloso corazón, 1938).
The Patriot (El patriota, 1939).
Other Gods (Otros dioses, 1940).
Dragon Seed (La estirpe del dragón, 1942).
The Promise (La promesa, 1943).
Pavilion of Women (Pabellón de mujeres, 1946).
Portrait of a Marriage (Retrato nupcial, 1948).
Kinfolk (Los Parientes,1949).
The Child Who Never Grew (El niño que nunca creció, 1950)
The Hidden Flower (La flor escondida, 1952)
My Several Worlds: A Personal Record (Mis diversos mundos, 1954).
Letter from Peking (Carta de Pekín, 1957).
A Bridge for Passing (Puente de paso, 1962).
The Living Reed (El cañaveral viviente, 1963).
Death in the Castle (Muerte en el castillo, 1964)
The three daughters of madame Liang (Las tres hijas de madame Liang, 1969)
China como la he visto (1971), libro de memorias.
Yu Lan, el niño aviador de china (1973).

Escribió además un folleto, por el que fue expulsada de la Junta Presbiteriana de Misiones, titulado: ¿Tienen defensa las misiones extranjeras?

En 1937 se adaptó La buena tierra al cine. Dicha película consiguió dos premios de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de los Ángeles, California. Los galardones obtenidos fueron: Mejor actriz y mejor fotografía.

En 1944 se adaptó La estirpe del dragón. No tuvo mucho éxito, pero resulta curioso ver todo un reparto occidental con ojos rasgados. Entre otros, Katharine Hepburn.

En el año 2001 se  adaptó la novela "Pabellón de mujeres" a la gran pantalla 

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viernes, 27 de junio de 2014

Rebecca Louise Law


Rebecca Leaw Louise nacida en Cambridge en 1980 es una artista de instalaciones con sede en Londres conocida por su transformación de espacios usando cientos o miles de flores colgantes o en otras disposiciones . Formada en Bellas Artes en la Universidad de Newcastle en Inglaterra, Law ha estado trabajando con materiales naturales por 17 años, una práctica que implica una constante exploración de las relaciones entre la naturaleza y los seres humanos. En los últimos años ha trabajado en numerosos espacios públicos, museos y galerías, y ha sido colaboradora de marcas de gran renombre.


 Rebecca se ha introducido en el Land Art Projects para fomentar el cambio social a través del compromiso con la naturaleza desde sus manos. 'Sus sensoriales paredes y cielos florales, estimulan a los espectadores a convertirse en participantes activos en sus obras, siendo estas verdaderamente inolvidable' Oliver Dupon. Ella opera desde un estudio en Columbia Road, East London.


Os recomendamos entrar en su pagina y perderos en todas sus propuestas llenas de sensibilidad y belleza .


http://www.thisiscolossal.com/2014/04/suspended-floral-installations-by-rebecca-louise-law/
https://www.facebook.com/photo.php?fbid=758898037474414&set=a.185921478105409.42098.179531498744407&type=1&theater
http://www.rebeccalouiselaw.com/biography/
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jueves, 26 de junio de 2014

María Mavanza




Mary Mavanza, gerente de (JGI) programa TACARE del Instituto Jane Goodall en Tanzania, fue reconocida como una de las seis mujeres heroínas  de la conservación global, en un evento en el Capitolio auspiciada por la Fundación de las Naciones Unidas, la Alianza para la Conservación Mundial, y el Movimiento del Cinturón Verde. Junto con el grupo de mujeres elegidas heroinas  en el evento, María se  dirigió a los miembros y al personal del Congreso y la administración de EE.UU. y les pidió tomar un papel de liderazgo en la conservación.
"Si usted quiere asegurarse de que el medio ambiente se conserva, trabajé con las mujeres, ya que son los que sienten el pellizco de la degradación ambiental más," dijo María.
En la mayoría de los países en desarrollo, las mujeres son las principales proveedoras de agua, combustible, alimentos, medicinas y otras necesidades básicas. Debido a que son las más directamente relacionadas con el medio ambiente, las mujeres son los más directamente afectados por la degradación ambiental. La deforestación-una forma importante de daño ambiental en muchos países en desarrollo-lleva a la disminución de las capas freáticas, a desertificación, y a un aumento de la incidencia de la erosión, inundaciones y sequías, en última instancia, afecta la productividad y seguridad agrícola. Debido a la deforestación y la escasez de agua, las mujeres tienen que viajar más lejos y pasar cada vez más tiempo recogiendo los escasos recursos naturales, de otra manera podrían estar recibiendo una educación,  trabajando, o  en el cuidado de sus hijos.
En el evento, María señaló que cuando las mujeres están sanas y tienen el tiempo y la oportunidad de ganar y controlar los ingresos, son más propensas a centrarse en la nutrición de sus familias, la salud y la educación, y son más capaces de conservar su medio ambiente.
 El programa de conservación centrado en la comunidad de JGI, TACARE, mejora los medios de vida de las poblaciones rurales a través de programas de desarrollo comunitario, la silvicultura, la agricultura, la salud y la educación. Como gerente de TACARE, María ha ayudado a apoyar la labor del programa de promoción de cocinas económicas, proporcionar becas a las niñas, a la construcción de escuelas e instalaciones de agua potable. María ha ayudado a cientos de mujeres de Tanzania  a iniciar negocios sostenibles con el medio ambiente, facilitando el establecimiento de planes de microcrédito y  capacitación en materia de contabilidad. Al mejorar los medios de vida de las personas que viven alrededor del Parque Nacional de Gombe, María ha colaborado en la protección de los cerca de 200.000 hectáreas de bosques y ha trabajado con 24 aldeas para crear planes de uso del suelo.
http://wwf.panda.org/?196343/Mujeres-Heronas-de-la-Conservacin-Mundial
https://www.facebook.com/note.php?note_id=149631871745502
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miércoles, 25 de junio de 2014

Ana María Matute novelista española

Ana María Matute Ausejo (Barcelona, España, 26 de julio de 1925 - Barcelona, 25 de junio de 2014)​ fue una novelista española miembro de la Real Academia Española (donde ocupó el asiento «K») que en 2010 obtuvo el Premio Cervantes. Matute fue una de las voces más personales de la literatura española del siglo XX y es considerada por muchos como una de las mejores novelistas de la posguerra española.


Hoy nos ha dejado esta gran mujer . Queremos traer aquí  unos apuntes  de su vida como tal, eso que la une más a todas nosotras, también contaremos de sus éxitos literarios. Celebramos desde aquí su vida, y agradecemos todas sus valientes aportaciones. Os invitamos a perderos en sus libros y en sus entrevistas .
Vivió de niña una época espantosa, la guerra civil, pero por entonces ya escribía muchos cuentos, que la salvaron, como la han salvado tantas veces sus historias. Luego vivió la posguerra. Se casó con un poeta muy culto y muy interesante, pero también muy egoísta y muy mala persona. Se lo hizo pasar muy mal y a los tres años de casarse ella ya sabía que no le quería nada, pero aguantó siete más. Decidió separarse a los diez años de la boda. Pero en la dictadura, ya lo saben, no había mujer que se divorciara de su marido. Ella lo hizo. Y no calculó las consecuencias: divorciarse de su marido, con Franco, suponía perder a su único hijo, algo que ella comprobó con inmenso dolor cuando se lo quitaron. “Eso fue lo más terrible del mundo, me quitó a mi hijo en 1963 y no lo pude volver a tener hasta que pasaron tres años”, cuenta, “aunque tuve la suerte de que mi suegra era muy buena y me permitía verlo sin que su padre se enterara…”

Recuperó a su hijo y vivió una época muy buena: se fue a vivir a EE UU, primero invitada por un profesor norteamericano y luego como profesora de Novela Española Contemporánea. Conoció a todos los republicanos españoles que habían tenido que exiliarse y, más tarde, al que sería su segundo marido, “el marido bueno”, como ella lo llama, un francés muy buena persona del que se enamoró locamente. Se casaron. Vivieron juntos 28 años, viajaron por el mundo e incluso, una noche, hicieron el amor sobre el Río de las Perlas de Hong Kong. Se querían. Estuvieron juntos hasta que él, un buen día, murió. “Tuvimos crisis, pero las superamos, porque nos queríamos tanto…”, me aclaraba Ana María, en el salón de su casa, mientras terminaba a tragos lentos su café.
— ¿Qué consejo le darías a un joven escritor que empieza escribir?
— Vivirrrrrr. Vivirrrrr. Viviiiiiirrrrrr —lo dijo así, tres veces seguidas y alargando la r, con desgarro, como sólo podría pronunciar esa palabra alguien que ha vivido mucho—. Y pasarlo mal a veces. Porque si no cuando lo pasas bien no lo valoras. La mejor universidad es la vida. Y yo he vivido a tope. A tope. He sido una aventurera. Y me alegro. No me arrepiento de nada. Ni de lo malo ni de lo bueno. Viciosa no he sido, ¿eh? Yo no me he drogado nunca. Jamás me he pegado un chute ni me he fumado un porro. ( entrevista de Curro Cañete )




La escritora Ana María Matute, premio Cervantes en 2010, académica y una de las grandes autoras de la posguerra española, ha fallecido este miércoles en su domicilio de Barcelona a un mes de cumplir 89 años. Hace sólo unos meses, fue la encargada de entregar la última edición del premio Nadal en su ciudad, donde había nacido el 26 de julio de 1925.


Ana María Matute se dio a conocer en la escena literaria española con ‘Los Abel’, una novela inspirada en la historia bíblica de los hijos de Adán y Eva, en la cual reflejó la atmósfera española inmediatamente posterior a la contienda civil desde el punto de vista de la percepción infantil. Este enfoque se mantuvo constante a lo largo de su primera producción novelística y fue común a otros representantes de su generación, la llamada generación de los "niños asombrados".
A los cinco años, tras haber estado a punto de morir por una infección de riñón, escribió su primer relato, ilustrado por ella misma. A los ocho años volvió a padecer otra enfermedad grave y la enviaron a vivir a Mansilla de la Sierra (Logroño) con sus abuelos. Se educó en un colegio religioso en Madrid y con 17 años escribió su primera novela, ‘Pequeño teatro’ por la que Ignacio Agustí, director de la editorial Destino en aquellos años, le ofreció un contrato de 3.000 pesetas que ella aceptó. Sin embargo, la obra no se publicó hasta ocho años después.

Las novelas de Ana María Matute no están exentas de compromiso social, si bien es cierto que no se adscriben explícitamente a ninguna ideología política. Partiendo de la visión realista imperante en la literatura de su tiempo, logró desarrollar un estilo personal que se adentró en lo imaginativo y configuró un mundo lírico y sensorial, emocional y delicado. Su obra resulta así ser una rara combinación de denuncia social y de mensaje poético, ambientada con frecuencia en el universo de la infancia y la adolescencia de la España de la posguerra.

A la par la autora barcelonesa cultivaba el relato corto y publicaba títulos como ‘El tiempo’, ‘Historias de la Artámila’ o ‘Algunos muchachos’. Igualmente, a comienzos de los sesenta, editó dos libros corte autobiográfico: ‘A la mitad del camino’ y ‘El río’. En estas páginas evoca sus experiencias de la niñez en el ambiente rural y bucólico de Mansilla de la Sierra.

De vuelta a la producción novelística… Ana María Matute se aventuró a escribir la trilogía ‘Los mercaderes’, integrada por ‘Primera memoria’, ‘Los soldados lloran de noche’ y ‘La trampa’, que gozaron de un gran éxito en su época. Después llegaría la publicación de la conocida obra ‘La torre vigía’, donde narra la historia de un adolescente que debe iniciarse en las artes de la caballería. Aunque sigue la línea de las anteriores, se da en ella un cambio histórico de ambientación hacia el período medieval, rasgo que se ha convertido en el universo de sus libros más recientes, publicados tras un dilatado período de silencio literario: ‘Olvidado Rey Gudú’ (1997) y ‘Aranmanoth’.

Asimismo a lo largo de su carrera editorial han visto la luz también cuentos para niños. Muchos de ellos recopilados bajo los títulos ‘Los niños tontos’, ‘Caballito loco’, ‘Tres y un sueño, ‘Sólo un pie descalzo’y ‘Paulina’.
Fallece en Barcelona, su ciudad natal, en 2014.

http://www.clubcultura.com/clubliteratura/clubescritores/matute/lecturas.htm
http://cultura.elpais.com/cultura/2014/06/25/actualidad/1403686135_962240.html
http://www.clubcultura.com/clubliteratura/clubescritores/matute/
https://www.facebook.com/photo.php?fbid=425953997545071&set=pcb.425954320878372&type=1&theater
http://blogs.revistavanityfair.es/vanityshow/2013/09/02/ana-maria-matute-mi-unica-droga-he-sido-yo-misma/
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martes, 24 de junio de 2014

Donna Haraway


Donna Haraway nació el 6 de septiembre de 1944 en Denver, Colorado, actualmente es profesora del programa de Historia de la Conciencia en la Universidad de California, Santa Cruz, EE.UU. Es la autora de «Primate Visions: Gender, Race, and Nature in the World of Modern Science» (1989), «Simians, Cyborgs, and Women: The Reinvention of Nature» (1991) -un destacado texto en la teoría de las políticas del ser post humano, el ciborg, y la interacción hombre máquina- y «Testigo_Modesto@Segundo_Milenio. HombreHembra©_Conoce_Oncoratón®» (1997).

Haraway se graduó en Zoología y Filosofía el año 1966 en el «Colorado College» obteniendo la beca de la fundación Boettcher. Vivió en París un año estudiando filosofía de la evolución con una beca Fulbright antes de completar su doctorado en el Departamento de Biología de Yale en 1972. Escribió su tesis sobre las funciones de la metáfora en la configuración de la investigación en biología del desarrollo en el siglo XX.

Haraway ha enseñado estudios de la mujer y «Ciencia General» en la universidad de Hawái y en la universidad Johns Hopkins. En septiembre de 2000, Haraway fue premiada con altos honores por la «Society for Social Studies of Science», con el premio J.D. Bernal, por una vida de contribuciones en el campo. Haraway es la principal pensadora acerca de la relación amor/odio entre personas y máquinas. Sus ideas han detonado una explosión de debates en áreas tan diversas como en primatología, filosofía y biología del desarrollo (Kunzru, 1).


Donna Haraway una de las autoras que examina explícitamente la noción de experiencia y que se presenta como adherente al pensamiento posmodernista.
La lectura de Haraway no es tarea sencilla porque su argumentación, estrategias, intereses y áreas de formación son diversos. El haber obtenido una triple especialización en Zoología, Filosofía y Literatura da cuenta de sus múltiples incumbencias y de la amplitud de su espectro de conocimientos que va desde su atracción por las células y los organismos hasta el manejo de las metáforas.
Haraway indica cómo fueron impactando en ella las ideas y tesis de las teóricas feministas que la precedieron. En un primer momento, cuando su escritura estaba más ligada a la biología y desde una posición feminista socialista eurocéntrica estadounidense, consideró a las mujeres como no marcadas. Pero al comprender que los conocimientos son conocimientos situados, fueron apareciendo las múltiples marcas que las teóricas afronorteamericanas se encargaron de señalar, al igual que las que provienen de las denuncias de las post-colonialistas y las tercermundistas. Haraway advierte que puede hacerse una lectura chata del concepto de situación, a la que se opone. Cuando nos habla de la situaciónse refiere no sólo a un lugar desde el cual se habla, por lo que referirse al “punto de vista” no es una metáfora adecuada para lo que quiere expresar, sino al espacio, en el sentido que a este le atribuyen quienes se dedican a la geografía10 (Haraway, 2000: 71) En su antología Ciencia, cyborgs y mujeres encontramos un artículo dedicado expresamente a la exposición sobre el concepto de experiencia titulado “Leyendo a Buchi Emecheta: pugnas por la `experiencia de las mujeres’ en los estudios sobre la mujer”. Allí aclara que como responsable de enseñar “Asuntos metodológicos en el Estudio de la Mujer”, un curso obligatorio, debía considerar la construcción de la “experiencia femenina” en las aulas, pues la veía afectada por distintos aspectos políticos, de poder y de hegemonías.
  En el caso de los estudios sobre la mujer, la pedagogía resultaba para ella una técnica política y teórica en la que la “experiencia de la mujer” se construye como objeto de conocimiento y de acción. Así el concepto de “experiencia de la mujer” equivale en Haraway al de “conciencia de la mujer”. (Haraway, 1987a: 186)
Haraway sostiene que los discursos de la teoría feminista y el estudio crítico del discurso colonial se intersecan y se necesitan mutuamente. El binomio personal y político de la teoría feminista estaría “determinado” por el binomio local y global de los estudios post-coloniales.
El concepto “experiencia de la mujer” se abre en dos ramas “local” y “global” y cada uno de ellos a su propia la vez sigue bifurcándose en “personal” y “político”.
En ese mismo ensayo acerca de las posibles lecturas de Buchi Emecheta, escritora, madre, inmigrante, independiente, africana, Ibo, insiste en que lo global tiene que ser considerado al mismo tiempo que lo local, del mismo modo que lo que sucede con la apreciación de lo personal y lo político. Las dos parejas binarias se muestran indisolublemente unidas al intersecarse ambos discursos, el feminista con el postcolonial, que grafica en un árbol o mapa el que se puede continuar bifurcando.
El feminismo cyborg de Haraway, construido a través de estrategias retóricas como la ironía, resume su posición respecto de la fusión de los intereses políticos y epistemológicos de una postura feminista.
Haraway defiende políticas y epistemologías de la localización, del posicionamiento y de la situación, en las que la parcialidad y no la universalidad es la condición que permite lograr un conocimiento racional. La objetividad feminista resulta una objetividad encarnada, que provee conocimientos situados y a partir de un posicionamiento crítico. Así sólo una perspectiva parcial promete una visión objetiva.
Esta pensadora une conocimiento a política, y afirma que la alternativa al tan temido relativismo de la filosofía autoritaria, está representada por los conocimientos parcialesocalizables y críticos que admiten la posibilidad de conexiones denominadas solidaridad en política y conversaciones compartidas en epistemología.
“Las versiones de un mundo `real’ no dependen de una `lógica del descubrimiento’, sino de una relación social de `conversación’ cargada de poder. El mundo no habla ni desaparece a favor de un amo descodificador. Los códigos del mundo no están quietos, a la espera de ser leídos. El mundo no es materia prima para la humanización […] (Haraway,1993: 135)
Según Haraway el relativismo es una manera de no estar en ningún sitio mientras se pretende al mismo tiempo estar en todas partes. Así afirma que la “igualdad de posicionamiento es una negación de responsabilidad y de búsqueda crítica. El relativismo es el perfecto espejo gemelo de la totalización en las ideologías de la objetividad”
El estilo pasional y provocativo de Haraway sumado a la originalidad de su propuesta la ha convertido en un ícono del pensamiento feminista. La posición posmoderna que asume es una muestra de cómo la adhesión al posmodernismo no implica automáticamente la aceptación de un pensamiento post-estructuralista, ni quedarse en una deconstrucción que deje un vacío de sentido. Contra las fronteras tradicionales que separan las distintas disciplinas alega en favor de la superación de campos entre la ontología y la epistemología.
Ana María Bach  en El rescate del conocimiento,TEMAS DE MUJERES -Revista del CEHIM -Año 6 – Nº 6 - 2010

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lunes, 23 de junio de 2014

Stephanie Kwolek química inventora el Kevlar


Stephanie Kwolek(New Kensington, 31 de julio de 1923 − Wilmington, 18 de junio de 2014), licenciada en química, comenzó a trabajar para DuPont en 1946, aprovechando el vacío dejado en la empresa por muchos hombres que habían entrado en el Ejército durante la Segunda Guerra Mundial, detalla Efe.
Tenía 42 años cuando inventó el Kevlar a partir de polímeros de cristal líquidos que, una vez metidos en una máquina, se transformaban en un material resistente.
Nunca se casó, porque "cuando eres una química que persigue con vehemencia algo, no hay mucho tiempo para salir en citas", pero era sociable y tenía muchos amigos, de acuerdo con Vasta.
Ganadora de la Medalla Nacional de Tecnología en 1996, Kwolek conservaba pequeñas bobinas de Kevlar en su vivienda.
"Ni en mil años me habría imaginado que ese pequeño cristal líquido se desarrollaría para ser lo que es", dijo Kwolek en una entrevista con el diario The News Journal en 2007.

Kwolek, inventora de la fibra Kevlar que se convirtió en el componente esencial para los chalecos antibalas en el último medio siglo, falleció el viernes  dia 18 de junio de 2014 a los 90 años en Talleyville, Delaware, tras una breve enfermedad, según dijo su amiga Rita Vasta a medios estadounidenses.

El Kevlar es una fibra de alto rendimiento, cinco veces más resistente que el acero en igualdad de peso, que desde su salida al mercado en 1965 ha sido muy utilizada por los cuerpos de seguridad y el ejército, especialmente en la fabricación de chalecos antibalas y contra ataques con arma blanca, indica la agencia Efe.
También se usa en la estructura de vehículos, equipos de bomberos y en la construcción, para dar una mayor resistencia ante tornados y explosiones, además de en los frenos y neumáticos para la automoción, componentes para aviones, prendas de protección y para la defensa personal.

Una carrera distinguida
"Todos estamos entristecidos por el fallecimiento de la científica de DuPont Stephanie Kwolek, una química creativa y una verdadera pionera para las mujeres en la ciencia", dijo en un comunicado la presidenta de DuPont, Ellen Kullman.
"Su síntesis del primer polímero de cristal líquido y la invención del Kevlar fueron los hitos de una carrera distinguida", añadió Kullman, de acuerdo a la cita de Efe.
El Club de Supervivientes Kevlar, una alianza entre DuPont y la Asociación Internacional de Jefes de Policía, ha documentado al menos 3,200 vidas salvadas gracias al uso de la fibra inventada por Kwolek.
"Cuando piensas en lo que he hizo, es increíble. Hay literalmente miles y miles de personas vivas gracias a ella", indicó al diario USA Today un exdirector del Club de Supervivientes Kevlar, Ron McBride, cuyo propio hijo pudo salvar su vida gracias al Kevlar de su chaleco mientras servía como asesor naval en Irak.

'Mujeres en la química'
"Sabía que había hecho un descubrimiento", dijo Kwolek en una entrevista hace tres años como parte de la serie "Mujeres en la química", de la Fundación Chemical Heritage. "No grité Eureka, pero estaba muy emocionada, igual que todo el laboratorio, y los jefes estaban emocionados porque estábamos buscando algo nuevo, algo diferente y eso era así", informa por su parte The Associated Press.
Aunque el Kevlar se ha vuelto sinónimo de chalecos blindados y cascos, también se usa en productos como aviones, vehículos blindados, celulares y veleros.
El senador Chris Coons de Delaware dijo en un comunicado que Kwolek hizo más seguro al mundo.
Vasta dijo que Kwolek había estado enferma desde hacía una semana, aunque desconocía la causa de su muerte. Vasta dijo que se realizaría una misa católica en memoria de Kwolek el 28 de junio.

http://es.wikipedia.org/wiki/Stephanie_Kwolek
http://noticias.univision.com/article/1998240/2014-06-21/estados-unidos/muere-stephanie-kwolek-invento-fibra-kevlar-fundamental-chalecos-antibalas
http://es.wikipedia.org/wiki/Kevlar
http://herstoria.com/?p=853#more-853
http://content.time.com/time/specials/2007/article/0,28804,1677329_1677708_1677836,00.html
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domingo, 22 de junio de 2014

Florbela Espanca poeta portuguesa



Flor Bela de Alma da Conceição, conocida como Florbela Espanca (Vila Viçosa, Portugal, 8 de diciembre de 1894 - Matosinhos, Portugal, 8 de diciembre de 1930), fue una escritora portuguesa. Precursora del movimiento feminista en Portugal, tuvo una vida tumultuosa, inquieta, transformando sus sufrimientos íntimos en poesía de la más alta calidad, cargada de erotismo y feminidad.

 Hija de Antónia de Conceição Lobo y de João Maria Espanca, que no la reconoció como hija. Sin embargo, tras la muerte de Antónia en 1908, João y su mujer Maria Espanca crían a la niña. Su padre sólo reconocería la paternidad muchos años después de la muerte de Florbela.
En 1903 Florbela Espanca escribió la primera poesía de que se tiene conocimiento, A Vida e a Morte. Se casó en el día de su cumpleaños en 1913, con Alberto Moutinho. Concluyó un curso de Letras en 1917, inscribiéndose después en Derecho, siendo la primera mujer en hacerlo en la Universidad de Lisboa.

Sufrió un aborto involuntario en 1919, año en que publica el Livro de Mágoas. Es en esa época cuando Florbela comienza a presentar síntomas serios de desequilibrio mental. En1921 se separa de Alberto Moutinho, teniendo que afrontar los prejuicios sociales al respecto. Al año siguiente se casa por segunda vez, con António Guimarães. El libro Sóror Saudade es publicado en 1923. Florbela sufre un nuevo aborto, y su marido pide el divorcio. En 1925 se casa por tercera vez, con Mário Lage.

La muerte de su hermano Apeles (en un accidente de aviación) la afecta gravemente y la inspira para escribir As Máscaras do Destino. Intentó suicidarse por dos veces en octubre y noviembre de 1930, en vísperas de la publicación de su obra maestra, Charneca em Flor. Tras el diagnóstico de un edema pulmonar se suicida el día de su cumpleaños, el 8 de diciembre de 1930. Charneca em Flor se publicaría en enero de 1931.






Fumo



Longe de ti são ermos os caminhos,

Longe de ti não há luar nem rosas;
Longe de ti há noites silenciosas,
Há dias sem calor, beirais sem ninhos!

Humo

Lejos de ti son yermos los caminos,
Lejos de ti no hay luz de luna ni rosas;
Lejos de ti hay noches de silencio

¡Hay días sin calor, aleros sin nidos!






AMAR!




Eu quero amar, amar perdidamente!

Amar só por amar: Aqui... além...
Mais Este e Aquele, o Outro e toda a gente...
Amar! Amar! E não amar ninguém!


Recordar? Esquecer? Indiferente!...

Prender ou desprender? É mal? É bem?
Quem disser que se pode amar alguém
Durante a vida inteira é porque mente!


Há uma primavera em cada vida:

É preciso cantá-la assim florida,
Pois se Deus nos deu voz, foi pra cantar!


E se um dia hei-de ser pó, cinza e nada

Que seja a minha noite uma alvorada,
Que me saiba perder... pra me encontrar...



¡AMAR!



¡Yo Quiero amar, amar perdidamente!

Amar sólo por amar: aquí... allá...
A Éste, a Aquél, al Otro y a todo el mundo...
¡Amar! ¡Amar! ¡Y no amar a nadie!


¿Recordar? ¿Olvidar? ¡Indiferente!...

¿Prender o desprender? ¿Es malo? ¿Es bueno?
¡Quien diga que se puede amar a alguien
Durante toda la vida es porque miente!


Hay una primavera en cada vida:

Es preciso cantarla así florida,
¡Pues si Dios nos dio la voz fue para cantar!


Y si un día he de ser polvo, ceniza y nada

Que sea mi noche una alborada,
Que me sepa perder... para encontrarme...


Amor que morre
 O nosso amor morreu... Quem o diria!
Quem o pensara mesmo ao ver-me tonta,
Ceguinha de te ver, sem ver a conta
Do tempo que passava, que fugia!


 Bem estava a sentir que ele morria...

E outro clarão, ao longe, já desponta!
Um engano que morre... e logo aponta
A luz doutra miragem fugidia...
Eu bem sei, meu Amor, que pra viver
São precisos amores, pra morrer,
E são precisos sonhos para partir.
E bem sei, meu Amor, que era preciso
Fazer do amor que parte o claro riso
De outro amor impossível que há-de vir!



(Vila Viçosa, Portugal, 8 de diciembre de 1894 - Matosinhos, Portugal, 8 de diciembre de 1930)
“AMAR!”, del libro “CHARNECA EM FLOR” (1931) Trad.: Juan Martín

http://users.isr.ist.utl.pt/~cfb/VdS/florbela.html
http://telearteypoesia.argentinaforo.net/t161-florbela-espanca
http://www.astormentas.com/florbela.htm
http://es.wikipedia.org/wiki/Florbela_Espanca
http://www.vidaslusofonas.pt/florbela_espanca.htm
http://mujerdelmediterraneo.blogspot.com/2012/02/agustina-bessa-luis-de-portugal.html
http://nattybravo.blogspot.com/2011/09/hace-poco-descubri-esta-escritora.html
http://espejodeisis.blogspot.com/2011/09/florbela-espanca-la-poetisa-del-amor.html
http://klitorianarevolucao.blogspot.com/2013/06/florbela-espanca.html

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